Módulo ABS Mazda 3: Dominando la Seguridad Vehicular

En el apasionante mundo de las refacciones para autos, una pieza clave que no puede pasar desapercibida es el módulo ABS. Este componente vital en los sistemas de frenado modernos ha demostrado ser un verdadero héroe anónimo cuando se trata de la seguridad al volante.

Concentrándonos específicamente en Mazda 3, este vehículo emblemático del gigante japonés Mazda está equipado con un eficiente y confiable sistema ABS. Cada uno de estos módulos contribuye a mantener intacta esa promesa fundamental: tu recorrido será tan seguro como emocionante. De modelos desde 2006 hasta versiones más actuales como las del 2021 o incluso futuristas prototipos del 2022 y 2023; cada variación tiene su correspondiente respuesta dentro nuestro catálogo virtual donde podrás encontrar justo lo que necesitas.


Da un vuelco al rendimiento de tu vehículo Mazda con estos módulos ABS imprescindibles, diseñados para ofrecer una experiencia de conducción sin igual. Son el corazón y alma del sistema de frenos, garantizando que cada viaje sea seguro y suave.

El "Módulo De Frenos Abs Mazda 3 Bdtt437a0 C7" es la pieza definitiva para cambiar las reglas del juego. Compatible con autos o camionetas, lleva como bandera orgullosamente el número de parte BDTT 43 7A0 ESC KI620 C7. Con él a bordo, estarás en control total incluso en los momentos más críticos. Por otro lado se encuentra el “Modulo Abs Mazda 3” compatible con modelos desde 2006 hasta 2009 cuyo código distintivo es: "6N61-2C405-GA". Un aliado confiable cuando se trata optimizar tu sistema ABS.

Finalmente te presentamos al robusto "Módulo Control Abs Mazda", perfecto tanto para la gama CX30 como para los modelos clásicos del automóvil compacto favorito: El famoso 'Mazda3'. Reconocible por su identificador único ‘10101’, este componente está especialmente diseñado para motores potentes de cuatro cilindros e ideal si buscas darle a tu auto esos años extra vitales entre cambios mayores.

Deja atrás tus preocupaciones sobre seguridad vial; estas refacciones son todo lo que necesitas llevar esa tranquilidad directamente bajo el capó de tu amada máquina rodante marca Mazda.


¡Atención, fanáticos de los motores y la velocidad! Cuando nos adentramos en el fascinante mundo del mantenimiento vehicular, hay dos criterios esenciales que pueden ser tan decisivos como un cambio a última hora en una carrera de Fórmula 1. Hablamos por supuesto del "Tipo de Vehículo" y el "Número de Parte", aspectos clave al momento buscar ese módulo ABS perfecto para tu Mazda 3.

Ahora bien ¿qué significan estos términos? ¡Vayamos con alto octanaje directo al grano!

El primero, 'Tipo de Vehículo', se refiere simplemente al modelo específico o serie fabricada por alguna casa automotriz. Por ejemplo: sedán compacto, SUV todo terreno o quizá un deportivo convertible. Esta información resulta vital porque cada diseño cuenta con especificaciones únicas; desde su aerodinámica hasta la disposición interna bajo capó...es decir no todos los componentes funcionarán igualmente bien en cualquier coche aunque sean prácticamente idénticos.

Por otro lado está nuestro segundo protagonista: El ‘Número de parte’. Este inocente conjunto numérico-alfabético es más crucial aún si cabe ya que permite identificar sin margen a error qué pieza exactamente necesitas para devolverle vida a tu máquina fiel compañera sobre ruedas.

¿Alguna vez has intentado armar un rompecabezas utilizando las piezas incorrectas? Seguramente te habrás dado cuenta rápidamente que eso solo lleva frustración y pérdida tiempo (y posiblemente algunas canas prematuras). Pues aquí aplica lo mismo; ignorar este detallito puede hacer imposible instalar ese sensor ABS que tanto buscas o incluso podría dañar irremediablemente otras partes de tu vehículo.

Así entonces, cuando te sumerges en la búsqueda del módulo ideal para el sistema antibloqueo frenos (ABS) de un Mazda 3, recuerda tener a mano estos dos datos: 'Tipo Vehículo' y ‘Número Parte’. Así podrás asegurarte acelerar con confianza hacia esa meta final donde solo aguarda éxito manteniendo tu coche no sólo funcional sino también seguro. ¡A rodar se ha dicho!