Las baterías para Suzuki Swift son esenciales en su funcionamiento, ya que permiten el arranque del motor y el normal desempeño de su sistema eléctrico. Por su relevancia en el correcto andar del carro, es esencial considerar varios factores antes de elegir una batería, como su tipo, la capacidad, las dimensiones, y la capacidad de reserva, entre otros aspectos.

Actualmente hay diversas baterías para Suzuki Swift, como las avanzadas AGM y las clásicas hechas de ácido-plomo. Estas varían en el precio, la durabilidad y el mantenimiento. 

Características de las baterías para Suzuki Swift

Vehículo

Las baterías para Suzuki Swift están disponibles para los modelos de vehículos lanzados entre 1995 y 2018, siendo carros compactos populares por su versatilidad y eficiencia. 

Cada una de sus actualizaciones generacionales ha sumado nuevas características en su funcionamiento, por lo cual una batería de, por ejemplo, 1995 no es igual a una diseñada para un modelo de 2014. 

Material de las baterías para Suzuki Swift

Una batería para Suzuki Swift puede estar hecha de ácido-plomo o AGM. Las de ácido-plomo son económicas y tradicionales, y están compuestas por placas de plomo que se sumergen en ácido sulfúrico para generar la energía que potencia el andar del carro. Es un ejemplar duradero y de buena performance en diversas condiciones climáticas, aunque requiere de un breve mantenimiento ocasional.

En cambio, las AGM representan la evolución de las baterías para Suzuki Swift, puesto que son más seguras y resistentes ante vibraciones. El electrolito se encuentra absorbido en una malla de fibra de vidrio, y al estar selladas no es necesario darles un mantenimiento. Si bien cuestan un poco más que las de ácido-plomo, disponen de una vida útil superior.

Origen

Con respecto al origen, las baterías para Suzuki Swift suelen fabricarse en México o Colombia. Estos países destacan por contar con fábricas que adaptan sus productos a los estándares internacionales, abasteciendo tanto el mercado interno como el externo. 

Voltaje de las baterías de Suzuki Swift

La batería para Suzuki Swift tiene un voltaje de 12 V, un estándar en la gran mayoría de los carros de pasajeros. Dicha cifra es perfecta para asegurar la energía necesaria para alimentar los sistemas eléctricos del vehículo y darle arranque al motor. 

De esta manera, una batería de 12 voltios permite el funcionamiento del aire acondicionado, de la radio, de las luces, y demás.

Capacidad

La capacidad de la batería para Suzuki Swift varía según el modelo, y puede oscilar entre 320 y 700 Ah. Dichos números hacen referencia a la cantidad de energía que puede almacenar y liberar continuamente antes de descargarse totalmente. 

Los modelos de mayor capacidad resultan convenientes en los Suzuki Swift modernos, pues necesitan de mayor potencia eléctrica debido a sus sistemas adicionales.

Capacidad de reserva 

Por el lado de la capacidad de reserva, esta puede ir de 85 a 100 minutos en las baterías para Suzuki Swift. Tal medida representa cuánto tiempo puede suministrar una corriente mínima si el alternador del carro deja de funcionar.

Las amplias capacidades de reserva sirven para que el Suzuki Swift continúe operativo por más tiempo sin tener que depender del sistema de carga del motor. Garantizan una seguridad extra en contextos de emergencia. 

Dimensiones y peso de las baterías de Suzuki Swift

Una batería para Suzuki Swift puede tener un ancho de 12 a 18.6 cm, largo de 18 a 24.5 cm y alto de 20 a 22.3 centímetros. El peso varía entre 10 y 18.5 kilogramos, siendo fácil de mover y reemplazar en caso de que lo amerite.

Volumen de electrolitos

El volumen de electrolitos en una batería para Suzuki Swift de ácido-plomo va de 1 a 2 litros. Tal parámetro es clave para que la batería funcione bien, y conservar el nivel óptimo de electrolitos asegura rendimiento y durabilidad a largo plazo. Para eso, hay que llevar a cabo un mantenimiento periódico revisando los niveles de ácido y agua.

Otras autopartes para Suzuki Swift

Además de la batería para Suzuki Swift, existen muchas otras autopartes importantes en su funcionamiento, como por ejemplo:

Sensor MAF

El sensor MAF mide la cantidad de aire que entra al motor, y es una información crucial para que la unidad de control del motor ajuste la cantidad de combustible para llevar a cabo una combustión óptima. Si dicho sensor falla o está sucio, el carro automáticamente pierde potencia, se le dificulta el arranque o pasa a consumir más combustible de lo normal.

Si bien reemplazarlo puede ser relativamente sencillo, es recomendable acudir a un profesional. Para mantenerlo en buen estado, hay que recurrir a productos especializados que eviten la acumulación de residuos que alteran su precisión. Al reemplazarlo, el Suzuki Swift gana respuesta en la aceleración, eficiencia de combustible y un andar más suave.

Cilindro maestro de clutch

Este componente se encarga de transmitir la presión hidráulica desde el pedal del clutch hasta el cilindro esclavo, que luego libera el embrague para efectuar un cambio de marchas. El cilindro maestro garantiza un acoplamiento/desacoplamiento óptimo entre el motor y la transmisión, facilitando los cambios de velocidad. 

Cuando este sufre fugas o desgaste interno, el pedal gana esponjosidad y dificulta el cambio de marchas, comprometiendo la seguridad del conductor. Es clave revisar mensualmente el nivel del líquido de clutch y buscar potenciales fugas.

Kit de distribución

Por el lado del kit de distribución, garantiza la sincronización entre el árbol de levas y el cigüeñal, permitiendo la precisa apertura y cierre de las válvulas. Es un kit compuesto por una correa de distribución, poleas, tensores e incluso puede incorporar una bomba de agua. Las correas de distribución deben estar en perfecto estado, pues su rotura puede dañar severamente las válvulas y pistones.

Es muy importante reemplazar el kit de distribución cada 60 a 100 mil kilómetros. El reemplazo a tiempo previene reparaciones muy costosas mientras contribuye en el óptimo mantenimiento del motor.

Funda cubreasientos

La funda cubreasientos es un complemento que protege y personaliza el interior de un Suzuki Swift, conservando los asientos en buen estado para prolongar su vida útil. Cuidan los asientos ante el desgaste del día a día, el derrame de líquidos, manchas y rayones que dañan la apariencia original de las butacas. Al adquirir una funda, esta debe cubrir los asientos por completo, y el ajuste no debe deslizarse ni arrugarse.

Más allá de la protección, es posible que mejoren la apariencia del vehículo, pues están disponibles en distintos colores, materiales y estilos. Existen opciones clásicas y cómodas de tela o sintéticas que simplifican la limpieza.